La divulgación del conocimiento científico resulta bastante compleja. Explicar por ejemplo, la electricidad, requiere mucha imaginación porque es poco intuitiva. Es habitual ver en la gente un temor reverencial hacia la electricidad pues es algo que no conoce bien.
Imaginemos un libro en el que se nos explique la electricidad desde la ignorancia de aquellos que la hicieron posible. Los pioneros de la electricidad se basaron en la observación de experimentos de cuya explicación no tenían conocimiento. Pero tenían imaginación, creatividad y ánimo emprendedor: una gran capacidad para obtener utilidad de lo que veían.
Uno se puede preguntar si es posible empezar una casa por el tejado. Quizás, pero llegará un momento en que o bien se cae o bien no podamos continuar. El fracaso inicial de las transmisiones transatlánticas se debió al desconocimiento que había de la electricidad. En efecto, el comienzo de la técnica eléctrica fue casi por ensayo y error. En función de lo que se veía con los ojos, se imaginaban aplicaciones.
Pero desde ese comienzo artesanal se pasó a un estudio teórico que condujo a grandes desarrollos. A partir de la obra de Faraday, Maxwell, Hertz y otros muchos, hemos llegado a la actualidad.
El Universo eléctrico
En el libro El universo eléctrico, David Bodanis traza una apasionante historia de la electricidad para todo el mundo. En él intenta describir de forma sencilla aspectos muy complejos. La electricidad mueve el mundo, utilizarla no es complejo, todos lo hacemos, sin embargo entenderla a fondo sí que lo es.
Asistimos en la lectura a una historia sorprendente donde hábiles personajes desarrollaban nuevas invenciones como el telégrafo, que hizo rico a Morse. La información en aquellos tiempos viajaba a la velocidad de los caballos.
La electricidad revolucionó las comunicaciones. Y después de que Hertz descubriera las ondas que llevan su nombre, el mundo no volvería a ser el mismo. La comunicación en la actualidad es casi instantánea.
El libro nos lleva desde los Estados Unidos a principios del siglo XIX hasta nuestra época, pasando por la segunda guerra mundial, donde asistiremos asombrados a la invención del radar, y a una poco conocida Operación Biting.
También veremos los desoladores bombardeos de Hamburgo (Operación Gomorra). En ellos tuvieron mucho que ver los nuevos desarrollos eléctricos.
La última etapa parte del libro habla de la electricidad que mueve nuestros pensamientos. A principios del siglo XIX, Mary Shelley escribe la fascinante novela Frankenstein. La autora da vida al monstruo con una descarga eléctrica, aplicando los más incipientes experimentos eléctricos de la época.
El universo eléctrico de David Bodanis es una excelente lectura para todo aquel que quiera acercarse a la historia del desarrollo de la electricidad. Está narrado desde una perspectiva histórica muy agradable de leer. No presenta excesivos detalles técnicos y tiene muchas referencias, algunas de ellas en español. El autor ha llevado a cabo un gran labor de documentación, lo que invita al lector curioso a seguir investigando por su cuenta.
(fotografía de la portada, wikimedia commons)